jueves, 27 de agosto de 2015

afomíos de los míos.


Deberíamos construír menos muros y más puentes.
El exquisito es un ser que ha conocido muy de cerca lo ordinario 
Hay evoluciones cerebrales que son involutivas
Los editores pasteleros deberían prohibirse porque suben el azúcar 
Si esperas el amor de tu vida saca billete de ida y vuelta
Si el mundo se hizo en seis días es porque Dios echó mano de los chinos
Los finales felices crean mucho desasosiego en la crítica
Antes de nacer somos eternos
Creo más en el end que en el happy
Siempre que vuelas muy alto, aterrizas bruscamente.


(partisana)

amor, tiempo: julia kristeva




"Ya no hay historias de amor. Sin embargo, las mujeres las desean, y también las desean los hombres cuando no se avergüenzan de ser tiernos y tristes como mujeres".(...) "Están juntos porque están separados. Llaman amor a esa mutua adhesión a su respectiva independencia. Eso les rejuvenece, les hace parecer adolescentes, casi infantiles. ¿Qué quieren? Estar solos juntos. Jugar solos juntos y a veces pasarse la pelota, como para demostrarse que no existe tristeza en esa soledad".(...) 

"Mis pacientes me confían sus penas de amor y se las arreglan para sufrir otras. Mientras, aquellos dos se lamen sus heridas como animales del bosque y emprenden nuevamente el camino serenamente. El tiempo del amor se hunde en nuestros gestos hasta que los cinco sentidos nos sumergen en el dolor o en el encantamiento. Se dice que el amor dura cuando los aventureros consiguen que sus heridas se cierren, cuando la piel se recompone, cuando uno y otro empiezan de nuevo a contemplarse como Narciso en el agua. Esto exige mucha paciencia, un gran culto al tiempo. En el amor hay que cuidar el tiempo".(...) 

"Se observa claramente que no existe tiempo sin amor. El tiempo es amor por las pequeñas cosas, por los sueños, por los deseos. No se tiene tiempo porque no se ama lo suficiente. Se pierde el tiempo cuando no se ama. Se olvida el tiempo pasado cuando no se tiene nada que decir a nadie".

(julia kristeva)

miércoles, 26 de agosto de 2015

regreso y salgo



Regreso después de casi un mes de ausencia. Me quema bajo los pies el suelo que piso. De vuelta, giro la llave y entro en casa. El tiempo se mueve -no pasa: se mueve- rápido, tan rápido como los aviones. Si no pasa nada, el tiempo no pasa. O sea, no se mueve. El tiempo se mueve, se acelera cuando suceden cosas. Porque el tiempo siempre ha sido un aliado estratégico. El tiempo es circular. Aún así, el tiempo se ha movido para mí. Yo con él.

La ciudad en anteriores agostos solo era un bochorno abúlico. Este año no me quedé.  Simplemente vine y fui. Regrese y me marché después.

Este tiempo largo de vacaciones de ida y vuelta he logrado dejar de pertenecerme a mí misma. Y de esperar.

jueves, 20 de agosto de 2015

entre hablar y callar está el abismo




No se trata de hablar...

No se trata de hablar,
ni tampoco de callar:
se trata de abrir algo
entre la palabra y el silencio.
Quizá cuando transcurra todo,
también la palabra y el silencio,
quede esa zona abierta
como una esperanza hacia atrás.
Y tal vez ese signo invertido
constituya un toque de atención
para este mutismo ilimitado
donde palpablemente nos hundimos.


(Roberto Juarroz) 



domingo, 16 de agosto de 2015

El recuerdo se olvida




los vínculos afectivos persisten en la memoria irremediablemente vivos, pero también inútiles, pues la memoria, como se dice en el epílogo, no es un lugar seguro: “Ahí también las cosas se desfiguran y se pierden. Ahí también terminamos alejándonos de la gente que amamos”. 
(Francisco Sol)

martes, 11 de agosto de 2015

quedarse quieto es peligroso


Deville afrimaba: "En la vida de los seres humanos se llega a un punto de equilibrio, en el que un año después del cual nunca más se vuelve a ser feliz". 

Yo diría que habla de ese punto en el cual uno reconoce que detrás del horizonte ya no va a encontrar nada nuevo, ni por supuesto lo que buscaba, sino otra senda

Al estilo de estos exploradores del Congo, incapaces de detenerse, más allá de penalidades y miserias inacabables que habrían detenido a cualquier otro. Que no sepan parar ni quedarse y que la vida tenga un valor inferior al del camino es un rasgo que parece importante. Morir es quedarse quieto, sin duda.

Jeanne Moreau in “Jules et Jim” (Francois Truffaut)

jueves, 6 de agosto de 2015

navegando en el lavabo


Se puede nadar en mares de ilusión, porque la cabeza vence siempre en capacidad de lontananza.

La tormenta perfecta siempre se presenta cuando el cielo no presagiaba nada.

Son las ilusiones el simulacro de vida que nos hace olvidarnos de lo efímera que es.

Si busca un amigo mira bien en los que tenías desde siempre.

La primera vez está sobrevalorada. Siempre son mejores las que le siguen.

lunes, 3 de agosto de 2015

el placer oral





Los silencios son barcos sin capitán y se pierden así, de boca adentro, como la niebla en la niebla. En esos barcos silenciosos no llevan cartas de navegación porque no leen. No escriben cuadernos de bitácora. Están a merced del viento. No hablan para no decir lo que ocultan.

(Obra: René Magritte "El arte de la conversación)

sábado, 1 de agosto de 2015

temblar



Temblar,
temblar no de miedo,
sino de deseo,
de algo no conocido,
nuevo,
temblar y no tener frío.

foto Carolina Leuthenegger